¿Inflación? Nahh!!!!

Bueno queridos seguidores de este Blog Minorista, como habrán seguramente oído desde la anterior semana, estamos ante una inminente escalada de los precios de la canasta familiar… si bien lo del pan se desmintió, artículos como la leche, la carne, la yerba y la cerveza ya han llegado con sorpresitas desde los centros mayoristas.
Si bien es normal para estas fechas un leve aumento de los precios, la masividad de los artículos que han entrado en esta fiebre de aumentos dejan de lado cualquier excusa relacionada con el invierno.
Porque sépanlo bien estimados clientes, es normal que la leche y los huevos aumenten en invierno, pero ¿¿¿¿La Yerba????? Ni siquiera la Cerveza se ha salvado! Ahora finalmente la cerveza Quilmes ha pasado la barrera de los $2 y se perfila para seguir aumentando… ¿Será este el fin de los que por la calle piden “Dame $2 pa’la birra”? Bueno, siempre quedan las marcas mas baratas a $1,50… pero uno tiene dignidad cheee……
Así que finalizamos las vacaciones de invierno con este aumento saladito de los artículos de primera necesidad (Quien me discuta que la cerveza no es de primera necesidad, lo ensarto con una chaira).
Esperemos que el bienaventurado Kirchner sepa capear el temporal inflacionario que se le viene encima, porque los únicos perjudicados no es el público, nosotros también la peleamos día a día….

¿Pata o Pechuga?

Bien, creo que es hora de que lo sepan: No solo soy un simple almacenero: también incursiono en el rubro “Polleria” o “Granja” ¿Por qué? Simplemente la diversificación de los 90’s nos obligó a expandirnos hacia otros rubros asociados al formato de almacén. En todo caso, es una historia para contar en otro momento.
Bien, el clásico dilema de la mesa Argentina ¿Pata o Pechuga? Podríamos definirlo como el súmun de la diversidad gastronómica en las mesas populares: uno compra un pollo y en un solo producto obtiene decenas de combinaciones posibles (Hay miles de formas de cocinar un pollo, se sabe) pero solo dos preferencias: Pata o Pechuga.
¿Acaso estamos omitiendo los infames Menudos y a las nobles alitas? Nada de eso señores, simplemente nos centramos en las piezas mas importantes del ave: ya sabemos que las alas son inútiles en estos animales y que sus tripas no son del agrado de la mayoría, por lo que la Pata y la Pechuga ocupan la escena como los actores principales de un drama cotidiano.
La Secta de los adoradores de la Pechuga glorifica a esta pieza por su importancia como eje central del ave, de sabor delicado y ante todo, de su carne magra, con mínimos vestigios de grasa lo que la hace la “vedette” de las dietas y una de las piezas favoritas a la hora de la plancha vuelta-y-vuelta.
La Logia de los amantes de las Patas desprecia a la Pechuga por ser “seca” en comparación con la tierna y jugosa carne de la pata. Esgrimen a su favor que no se distingue entre pata izquierda o derecha a diferencia del unitarismo de la centralizada pechuga (¿Rosas odiaba la Pechuga?)
Aunque el debate parece continuar hasta el fin de los tiempos (O hasta la extinción del pollo) una cosa es segura: los partidarios de uno u otro bando seguirán obviando discutir en la mesa de Política, Fútbol y Religión…. Pero jamás darán su brazo a torcer ante el ingenuo comensal que pasando una fuente llena de piezas de pollo pregunte inocente: “¿Pata o Pechuga?”

Semana de la Dulzura.

Estamos en La Semana de La Dulzura, esta pequeña celebración del 1 al 7 de julio que por suerte tenemos los almaceneros donde a cambio de una golosina podemos darle besos a quien queramos… jejeje.
No enserio, este año casi me había olvidado, por suerte mi vecinita de al lado me lo recordó muy amablemente y fue la primera en recibir el dulce regalo (Ah, y un Bonobón)
No es la única celebración de este tipo que hay en el año, aunque es la mas conocida… otros ejemplos serian La Semana de la Pizza y la Empanada (Un clásico) y la Semana del Helado Artesanal…. El problema es que son fechas comerciales, casi nadie se las acuerda a no ser por las propagandas en tele y radio.
En fin, así que aprovechen las ofertas de 3 Bonobón por $1 y repartan besos por doquier, es la excusa perfecta (Nadie rechaza un Bonobón)